¿Por qué incluimos ponderaciones en el índice?
El sistema de puntaje del Índice de Secreto Financiero (FSI) toma el puntaje de secreto financiero de cada jurisdicción y lo combina aritméticamente con el Peso a Nivel Global que surge de los datos del FMI.
Decidimos incluir un ponderador por distintas razones.
En primer lugar, si clasificamos las jurisdicciones sólo según su grado de secreto financiero (vea el ranking puro de secreto financiero acá) –los pececitos como Vanuatu o Antigua y Barbuda quedarían en los primeros lugares. Los diez primeros puestos explicarían menos del 1% del mercado global de servicios financiero offshore. Incluso si todas esas jurisdicciones fueran totalmente transparentes el problema global estaría lejos de ser eliminado.
Nuestro ranking está diseñado para identificar a las jurisdicciones teniendo en cuenta su contribución a los problemas globales de evasión fiscal, flujos financieros ilícitos y secreto financiero. Buscamos identificar aquellas jurisdicciones donde las reformas a las leyes y regulaciones arrojarían los resultados más significativos.
Las diez jurisdicciones que encabezan nuestro índice explican cerca del 60 por ciento del mercado global de servicios financieros offshore.
Algunos argumentaron que al ponderar según el peso a nivel global nuestro índice “castiga” aquellas jurisdicciones con amplios sectores financieros. Pero la fórmula matemática utilizada fue diseñada para reducir el impacto del tamaño sobre la clasificación final. Así, es probable que una jurisdicción que mejora su puntaje de secreto financiero mejore su clasificación ya sea que cuente con una amplio sector financiero o no.
Este es el razonamiento detrás de la fórmula matemática. Mientras que el puntaje de secreto financiero oscila entre 38 y 80 puntos sobre 100, las ponderaciones según tamaño muestran un rango muchísimo más amplio, entre la pequeña Santa Lucía y Estados Unidos. Con una multiplicación directa, el tamaño de las jurisdicciones se volvería el factor determinante. Al combinar ambos puntajes, hacemos un énfasis matemático sobre el puntaje de secreto financiero (elevado al cubo) y restamos énfasis al peso (aplicando la raíz cúbica), de forma tal que otorgamos al secreto financiero su debida importancia, y para estar seguros de que el índice es sensible a los cambios en ambos componentes.
Una explicación técnica con la documentación sobre la fórmula, junto con más detalles sobre las ponderaciones de acuerdo al peso de cada jurisdicción, puede ser consultada en la metodología completa (pdf).